Aquí la maleta
Empezó siendo una maleta normal, con prestaciones adecuadas de transporte y con un modelo acorde a la edad de Las Abuelas Mágicas.
Pero poco a poco fue poniendo en evidencia su personalidad oculta que obligó a una reflexión profunda por parte del grupo.
¿Para qué sirve una maleta? Guarda cosas, las lleva de una parte a otra. Almacena ropa, fotos, libros, juguetes, objetos que también podrían ser, simple y llanamente: Recuerdos.
Por lo tanto al abrir la maleta, NUESTRA MALETA, empezamos a comprender que todos llevamos una dentro.
Solo nuestra voluntad sabrá qué hay que hacer con lo que tenemos escondido.
Solo nuestra voluntad sabrá qué hay que hacer con lo que tenemos escondido.
Podemos guardarlo, llevarlo de un lado a otro o lo que nos hace mas ligeros:
Repartir, poco a poco, parte de lo almacenado.
Repartir, poco a poco, parte de lo almacenado.
Tal vez nos encontremos, como fue nuestro caso, con una maleta repleta de material suficiente para hacer felices a unos niños (y también a sus padre o abuelos que ven aplaudir contentos a los pequeños).
Intentamos que ellos capten la emoción de nuestros cuentos o canciones y sonreímos ¡sorprendidas! de lo que estaba oculto en la maleta.
Y así vemos, con muy distintos ojos, todo lo que sacamos envuelto en ilusión, los días que compartimos alegrías infantiles.
¡Los recuerdos - juguetes -historias cobraron vida propia! y desde ese momento fueron los verdaderos protagonistas...
Divulgamos el secreto: Para sentirse mejor hay que compartir lo que uno tiene dentro.
Solo debemos encontrar la llave que abra nuestra maleta.
Todos tenemos algo que puede lucir con un brillo ignorado..
Nos vemos.
Teresa Ros
+++++++++++++++++++++++++





Teresa, te felicito en primer lugar por esta fantástica iniciativa y después por esta espléndida narrativa. Un abrazo
ResponderEliminarNo ha sido mi intención añadir suspense en mi comentario, simplemente me olvidé de escribir "Xavier"
ResponderEliminarUn besote. ¡Gracias!
Eliminar